Quinto domingo de Cuaresma

Año A • Cuaresma 5

(Utilice su Biblia para buscar las lecturas)

Ezequiel 37:1–14
Salmo 130
Romanos 8:6–11
San Juan 11:1–45

La Colecta

Dios todopoderoso, sólo tú puedes ordenar los afectos y voluntades rebeldes de los pecadores: Concede gracia a tu pueblo para amar lo que tú dispones y desear lo que tú prometes; a fin de que, en medio de los rápidos y variados cambios del mundo, nuestros corazones permanezcan fijos allí donde se encuentran los verdaderos goces; por nuestro Señor Jesucristo, que vive y reina contigo y el Espíritu Santo, un solo Dios, ahora y por siempre.  Amén.

El Libro del profeta Ezequiel nos dice:

"El Señor puso su mano sobre mí, y me hizo salir lleno de su poder, y me colocó en un valle que estaba lleno de huesos"
En esta primera parte de la lectura del profeta Ezequiel nos muestra tres personajes: El Señor, el profeta y los huesos secos. 
Definitivamente no somos "el Señor " así que solo nos quedan el profeta y los huesos secos. 
Si somos el profeta, el Señor nos toma de la mano y nos llena de su poder. Si somos los huesos secos, te recuerdo que la escritura termina dándole a esos huesos secos la vida y la esperanza.  Y en ocaciones se nos hece más fácil tomar el papel de víctimas y no hacer nada esperando que el Señor lo haga todo.  Pero en esta ocasión les invito a tomar el rol del profeta, llenarnos del poder de Dios y llevar la esperanza a muchos huesos secos que necesitan volver a la vida. La lectura de hoy es una lección de vida y esperanza para aquellos, que en este tiempo difícil,  lo necesitan. 

El Santo evangelio nos dice:

"Marta le dijo a Jesús: —Señor, si hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto. Pero yo sé que aun ahora Dios te dará todo lo que le pidas.
Jesús le contestó: —Tu hermano volverá a vivir.
Marta le dijo: —Sí, ya sé que volverá a vivir cuando los muertos resuciten, en el día último.
Jesús le dijo entonces: —Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí, aunque muera, vivirá; y todo el que todavía está vivo y cree en mí, no morirá jamás. ¿Crees esto? "
El Señor nos afirma en su santa palabra que él es la resurrección y la vida. También nos dice que si creemos en él no moriremos jamás.  Pero también nos hace la pregunta que todos debemos contestar " ¿crees en esto?
Si eres el profeta, te invito a creer y a llevar el mensaje de vida y aliento al que lo necesita. Si en este momento te consideras parte de los huesos secos: con desaliento, tristeza, miedo e incertidumbre, entonces déjate llenar del amor de Dios y estad quieto, como Lazaro y dejar que el Señor te llene de su amor. 
Hay esperanza, saldremos adelante. Deja que el Señor Jesucristo tome control de tu vida y te llene de su poder.

Padre Tony. 


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